Las vacaciones son un tiempo de descanso y desconexión, pero sabemos que, a nivel personal, el regreso a la rutina puede ser un desafío.
Sin embargo, volver a la rutina laboral en septiembre no tiene por qué ser el sinónimo de la depresión post-vacacional.
Para ayudarte en este proceso, aquí te ofrecemos algunos consejos para facilitar esta transición y puedas volver a tus labores de manera fácil y beneficiosa para tu salud mental, porque con las estrategias adecuadas, es posible convertir este momento en una oportunidad para revitalizarte y revitalizar al equipo y así mejorar la productividad de todos.
Veamos los cuatro consejos prácticos que desde GESTORALIA te recomendamos para ayudar a tu equipo a retomar la rutina de manera productiva y positiva:
1.- Haz una reconexión digital gradual
Desconectarse del entorno digital del negocio es esencial durante las vacaciones para descansar y recargar energías; así que lo recomendable es que, a la vuelta, se haga la reconexión de manera gradual.
Para ello, ajustar horarios poco a poco a reuniones o citas con clientes es muy recomendable, pues el cuerpo necesita acostumbrarse al ajetreo y ritmo frenético de la oficina poco a poco.
2.- Establece metas claras y realistas
Después de un período de descanso, es importante establecer metas claras y alcanzables para reorientarnos, ya que la falta de metas, no sólo puede generar desmotivación, sino que traerá baja productividad y con ello puede peligrar la estabilidad del negocio.
3.- Facilita una comunicación abierta y efectiva
Una comunicación abierta y efectiva es la clave para mantener tanto a los empleados, como a los clientes y/o proveedores alineados y motivados.
Así que, asegúrate de que la información fluya de manera transparente con las personas de tu equipo, con tus clientes, tus proveedores, etc.
4.- Promueve el bienestar y la salud mental
Es muy importante cuidar nuestro bienestar mental, así como el del equipo, con el fin de no sólo lograr una transición exitosa a la reincorporación, sino que así se podrán conseguir objetivos.
Para ello, recuerda apoyar y valorar al equipo, tomando medidas para favorecer sus actividades y controlar desempeño para estudiar qué podría estar fallando.